LINEA DE TIEMPO DE NL


 

Tiempos de paz en el Nuevo Reino de León

 

Para finales del siglo XVIII los habitantes del Reino vivían de forma simple, ingenua y poblaban la ciudad villas y pueblos, todo como una sola familia. Los sirvientes y esclavos estaban en paz. Contaban con escuelas modestas en las cabeceras de los municipios.

 

Las fiestas se celebraban casi de modo patriarcal, tanto las religiosas y patrióticas como las privadas. Festejaban bautizos con mucho bolo; entierros, con grandes ceremonias y matrimonios con fiestas duraderas.

 

Sólo existían dentro del Reino dos Ayuntamientos integrados: el de Monterrey y el de Linares.

 

Inicio de la Independencia: Hazañas insurgentes

 

La calidad de vida, el maltrato y el esclavismo que vivieron muchos de los mexicanos formó el movimiento que daría fin a la injusticia y a la sumisión. El deseo de vivir con libertad e igualdad empujó a las fuerzas populares a participar en esta manifestación culminante para el virreinato.

 

La madrugada del 16 de septiembre de 1810 inició la lucha por la Independencia de México. Se produjo el levantamiento y se dio el grito de Independencia en Dolores, Hidalgo. El movimiento tenía como líder a Miguel Hidalgo y Costilla, quien también integró el primer ejercito insurgente y fue excomulgado por tal causa.

 

Otros jefes insurgentes fueron Ignacio Allende, Aldama y Mariano Jiménez, cuyas cabezas tenían precio, mil pesos por cada uno. Mientras el movimiento tomaba fuerza, el estado se encontraba casi aislado, por las malas condiciones de los caminos y vías de comunicación.

 

En ocasiones los asuntos que requerían autorización de México o España tardaban demasiado, que a su regreso, ya habían perdido validez.

 

La noticia del comienzo de la lucha llegó al Nuevo Reino de León hasta el 29 de septiembre, aunque según algunos autores afirman que fue un mes después. (29 de octubre de 1810; aún no queda especificado).

 

Quien comunicó por carta al gobernador Manuel de Santa María, el inicio y popularidad insurgente fue el general Félix Calleja. La noticia se difundió de inmediato entre toda la población. En el ámbito rural el apoyo para el movimiento no se hizo esperar, cerca de 400 hombres, entre sirvientes, empleados y propietarios de haciendas del sur, se aliaron al ejército insurgente.

 

El general Calleja pidió a Santa María el envío de tropas a la Hacienda de la Pila, lugar donde preparaba su ejército para atacar a Hidalgo. En respuesta al apoyo que brindaron los rurales a los insurgentes, el obispo Primo Feliciano Marín de Porras impuso en el estado penas espirituales para quienes simpatizaran con el movimiento.

 

También, el Gobernador se preparaba para defender la región y evitar el apoyo a los insurgentes. Santa María estuvo en contacto con Manuel de Iturbide y con el coronel Antonio Cordero, gobernadores de Tamaulipas y Coahuila, respectivamente. Doscientos hombres distribuidos en tres compañías marcharon de Nuevo León con la misión de frenar el avance insurgente.

 

Una al mando de Francisco Bruno Barrera; otra, con José Domingo Castañeda y una más con Andrés Guajardo. Todos bajo las órdenes de Pedro Herrera y Leyva. Pero las tropas no llegaron a su destino, durante su recorrido se detuvieron en Real de Catorce para auxiliar a tropas anteriores a ellos; después, se instalaron en el sur de Saltillo.

 

Fuerzas insurgentes hacia el norte

 

Cuando el ejército insurgente avanzaba hacia el norte, Santa María asignó a Juan Ignacio Ramón un ejército para que se ubicaran en el sur del estado, con el fin de evitar la entrada de los insurgentes. Ramón estuvo en contacto por correspondencia con Mariano Jiménez, integrante insurgente y comisionado de Hidalgo para penetrar en las Provincias Interiores. Ramón, además de cartearse con Jiménez remitía reproducciones al gobernador Santa María.

 

Tiempo después, tanto Santa María como Juan Ignacio Ramón decidieron unirse al movimiento insurgente. El 17 de enero de 1811 proclamaron la insurgencia y nombraron como gobernador a Santiago Villarreal. A Ramón se le nombró responsable de las fuerzas rebeldes. Mientras que Santa María salió de Monterrey rumbo al Valle del Pilón, punto donde armó sus fuerzas para encontrarse con los insurgentes.

 

Cuando Mariano Jiménez llegó a Saltillo envió a Monterrey a Juan Bautista Carrasco e Ignacio Camargo para controlar a los sublevados. El 26 de enero de 1811 entró Jiménez a Monterrey, pero con la derrota de Hidalgo, en el Puente de Calderón, el insurgente se vio obligado a regresar.

 

Captura de los líderes insurgentes

 

Mientras el Ejército Insurgente llegaba a Saltillo con varias derrotas a cuestas (1811), en Texas daba inicio un movimiento contrarrevolucionario liderado por José Ramón Díaz de Bustamante, Ignacio Elizondo, entre otros. La aprehensión de los caudillos insurgentes se dio cuando éstos partían de Saltillo con rumbo a San Antonio Bejar (Texas). Como escaseaban las armas asignaron a Bernardo Gutiérrez de Lara la misión de proveerles de armamento estadounidense, y así poder penetrar Texas.

 

A su paso por Acatita de Baján, Coahuila fueron capturados, y trasladados a Chihuahua, lugar de su fusilamiento. Al gobernador Santa María y el general Juan Ignacio Ramón, se les fusiló en Monterrey.

Junta Gobernadora en Monterrey

 

Después de la muerte de los líderes insurgentes, se creó en Monterrey la Junta Gobernadora presidida por Blas José Gómez, hasta 1813. El gobernador en turno, Ramón Díaz de Bustamante, entregó el poder a la Junta. Lo sustituyeron Pedro Manuel del Llano seguido por Fernando Uribe.

 

El idealismo insurgente no terminó con la muerte de sus principales caudillos. En Nuevo León quedaron algunos grupos en los que intervinieron Rafael y Ramón González de Hermosillo, Juan de Villerías y José Herrera. Este bajo la gubernatura de Uribe atacó la plaza de Monterrey logrando penetrar hasta el centro de la ciudad donde los realistas lo derrotaron.

 

Otra partida insurgente peleaba por el Cañón de Salinas, a cargo de Policarpo Verástegui. Leonardo de la Cruz, José Urbina Cantú, Francisco Carrasco y Antonio Reyes formaron parte de este grupo.

 

A partir de la nueva división de la Comandancia General de las Provincias Internas, Joaquín Arredondo ocupó el cargo de Jefe de las de Oriente. En 1814, Arredondo estableció su cuartel general en Monterrey.

 

Aparente calma

 

La insurgencia no causó mas problemas en el estado, la pacificación sólo se interrumpió por ataques de indígenas no sometidos (lipanés y comanches). Pero la realidad era otra, además de los indígenas, había unos cuantos partidarios más, José María Morelos y Pavón se levantó en armas y retomó el movimiento de Independencia.

 

Morelos convocó al Congreso de Chilpancingo en septiembre de 1813 y participó como representante de Nuevo León en la lucha. A su muerte, Vicente Guerrero y Guadalupe Victoria continuaron peleando.

 

En Nuevo León fungía como gobernador Froylán Mier y Noriega, al término de su periodo fue precedido por Francisco Bruno de Barrera. Barrera apoyado por las autoridades eclesiásticas publicó por todo el reino, el "Indulto de Calleja" cuya intención principal era que todos los rebeldes regresaran sus armas y se enlistaran en las tropas de su Majestad.

 

La publicación no logró el éxito esperado, y los rebeldes se refugiaron en la sierra del estado como negativa a la propuesta del Indulto. Procedente de España desembarcó en tierras mexicanas, cerca de Soto la Marina, Francisco Javier Mina acompañado de voluntarios participantes de la lucha. Como parte de la tripulación venía fray Servando Teresa de Mier, quien volvía después de un largo destierro.

 

El gobernador Arredondo al saber del arribo de la embarcación española reunió tropas para combatirlos; pero Mina escapó durante la contienda a la sierra de San Luis Potosí. Los hombres que Mina dejó en el puerto se convirtieron en prisioneros de Arredondo. Entre los presos estaba Mier, de origen neoleonés, quien fue entregado a la inquisición.

 

Por su parte, Mina fue tierra adentro para realizar una expedición de combate y conquista. Tiempo más tarde fue capturado y fusilado frente al Fuerte de los Remedios.

 

Consumación de la Independencia

 

La lucha por la Independencia terminó con la firma del Plan de Iguala, el 27 de septiembre de 1821, acuerdo entre Agustín de Iturbide y Vicente Guerrero, Comandante del Ejército Realista y Jefe de las Fuerzas Insurgentes respectivamente.

 

Cuando la independencia se consumó, Arredondo huyó del Estado y se refugió en San Luis Potosí hasta su muerte. Gaspar López fue quien lo reemplazó y durante su gubernatura propagó el apego al Plan de Iguala. López juró la Independencia del aún Nuevo Reino de León, el 3 de julio de 1821, al igual que los ciudadanos y el ejército en la Plaza de Armas, por tanto, el reino quedó convertido en provincia.

 

Consecuencias de la Independencia

 

Agustín de Iturbide fue nombrado Emperador de México, en 1822. La duración de su poder fue de sólo un año, mediante el Plan de Casa Mata, en el que se unieron Antonio López de Santa Anna, Nicolás Bravo y Vicente Guerrero, fue el medio para derrocarlo. Como consecuencia fue proclamada la Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos (1824) dando paso al nacimiento de un Sistema de Gobierno Republicano, Representativo y Federal.

 

El Nuevo Reino de León se convirtió en el Estado Libre y Soberano de Nuevo León, por decreto del Congreso Constituyente, en ese mismo año.

 

Constitución del Estado: Diputaciones Provinciales

 

A partir de la consumación de la Independencia, se realizaron varios cambios en el gobierno y en las leyes, tanto en el ámbito nacional como local.

 

En general se reorganizó la Administración Pública. Previo al establecimiento del nuevo sistema político, se crearon Diputaciones Provinciales, grupos que dieron autonomía a las provincias. José María Morelos estuvo como diputado del Congreso del Reino de León.

 

Se crearon seis diputaciones en la Nueva España, una de ellas se instaló en Monterrey con diputados de las cuatro provincias internas de oriente: Nuevo León, Coahuila, Texas y el Nuevo Santander.

 

También en 1824 fueron electos los once diputados propietarios y los cuatro suplentes del primer Congreso de Nuevo León creado ese mismo año. La función básica del Congreso del Estado fue redactar la Constitución Política local, que en 1825 se aprobó.

 

El gobernador Parás quedó electo en ese año (1824). Este se preocupó por fomentar la agricultura, la minería y el comercio; así como la instrucción pública. En su periodo estableció varias instituciones para la enseñanza y el Seminario Conciliar de Nuevo León formó parte de la Universidad. La educación primaria se estableció como obligatoria y gratuita.

 

México: Liberales contra Conservadores

 

Los dos grupos políticos fuertes del país, liberales y conservadores, tuvieron frecuentes enfrentamientos desde 1824 hasta 1846.

 

Los liberales defendían la libertad y la democracia para todos por igual, por su parte los conservadores querían un gobierno donde se mantuvieran las jerarquías de las clases. La situación del país era de total división. Estados Unidos aprovechó la separación y debilitamiento de la nación para extender su territorio.

 

Las elecciones presidenciales estuvieron reñidas por la fuerte influencia de los dos partidos. Por el lado insurgente Vicente Guerrero, y Manuel Gómez Pedraza, por el conservador. El pueblo de Nuevo León apoyaba al insurgente, y el gobierno al conservador. La pugna electoral inició en 1828, ambos candidatos también eran apoyados por los masones, Guerrero por los masones yorkinos, quienes se distinguían por su liberalismo, y Gómez Pedraza por los masones escoceses, grupo que se caracterizaba por ser moderados y conservadores; además de antiguos realistas e iturbidistas.

 

El 12 de enero de 1829, el Congreso declaró como Presidente a Guerrero y como Vicepresidente a Bustamante. Pero la oposición aún permanecería, ya que los electos eran jefes de partidos antagónicos (contrarios). Fue hasta el 1º de abril cuando ambos ocuparon sus puestos. En Nuevo León fue nombrado gobernador Joaquín García, a pesar de que la mayoría era de su contrincante, Manuel Gómez de Castro.

 

Culminación de la Independencia

 

En México se promulgó la Ley General de Expulsión en 1827. Ley que ordenaba la expulsión de todos los españoles y extranjeros que se encontraran en el País. En 1828, los habitantes del estado supieron que en La Habana, Cuba, se preparaba una embarcación española para atacar tierras mexicanas.

 

Dicha embarcación estaba integrada por todos los que un año atrás habían sido expulsados, con la Ley General, y deseaban volver. Para lograr su objetivo, los exiliados se dieron a la tarea de convencer a Brigadier Isidro Barradas de que México deseaba integrarse de nuevo a España, ya que la separación había iniciado a partir de 1821, con Iturbide.

 

Barradas, sin conocer el verdadero motivo de la embarcación inició el viaje con 2,600 hombres y suficiente armamento para llegar a México.

En el mes de julio ancló cerca de Tamaulipas "La División de Vanguardia", y fue hasta agosto cuando llegó al puerto de Tampico. Nuevo León, al igual que el resto de los Estados de la República participaron con recursos y hombres, en el movimiento contra la embarcación española.

 

Las tropas de Mier y Terán, así como las de Antonio López de Santa Anna sitiaron el lugar y atacaron venciendo a Barradas junto con toda su tripulación. El triunfo de las armas mexicanas sobre Barradas marcó el punto final y el remate de todo el movimiento de Independencia.

 

Desde ese momento, el patriotismo tomó fuerza entre los mexicanos, quienes tuvieron repulsión por todo lo extranjero. Respondiendo con negativas, a cualquier tipo de negociación con España e hicieron mayor hincapié con los norteamericanos.

 

Bases Constitucionalistas en el Estado

 

En 1835, el Congreso se instaló como Constituyente y se promulgaron las Bases Constitucionales Centralistas. Un mes después de la promulgación de las Bases, la Convención de Texas tomó como pretexto el despotismo de Santa Anna y el desgobierno de la República para separarse de México.

 

Con el fin de evitar la separación, Santa Anna intentó someterlos por la fuerza. Varios días después atacó El Alamo; pero Houston derrotó al Jefe mexicano en San Antonio, y cerca de Harrisburg lo hizo prisionero. Mientras Santa Anna estuvo preso se celebró el Tratado de Velasco, en el que se pactaba la retirada de las tropas mexicanas y se obligó al Presidente a aceptar la independencia de los texanos. Estos declararon su Independencia el 1º de marzo de 1836.

 

Después del reconocimiento de Santa Anna, el Estado de Texas se convirtió en uno mas de la unión americana. México se independizó de España, para fines de ese año, cuando reinaba en nombre de doña Isabel, doña María Cristina de Borbón. Inició, entonces, Estados Unidos una guerra contra México, por las delimitaciones de tierra entre un país y otro.

 

Francia también manifestó sus reclamos por los perjuicios causados a sus habitantes en los movimientos federalistas y centralistas; entre otras, estaba la del pastelero Remontel, que exigía el pago de sus pasteles robados durante el Pronunciamiento de Tacubaya.

 

También en 1838, después de que el Ministro de Francia enviara su ultimátum al gobierno mexicano, las tropas francesas llegaron al puerto de Veracruz que ya había sido bombardeado y capitulado. Se celebró con Francia un tratado de paz y se liquidó el monto de las reclamaciones.

 

Brotes federalistas

 

Se registraron en 1838 y 1839 brotes federalistas en el País. Varios municipios del Estado y de sus alrededores fueron atacados y saqueados. Los federalistas volvieron a dominar Monterrey en abril; pero en mayo fueron expulsados, de nuevo, por los centralistas.

 

Para fines del 39, Antonio Canales y Antonio Zapata, cabecillas federalistas fueron culpados por los opositores de haber estado en común acuerdo con los indios bárbaros, asaltantes de la región, y con los separatistas de Texas.

 

Para combatir a los federalistas arribó a Monterrey el general Arista, Jefe de la División Auxiliar del Norte. Después, se dirigió a Tamaulipas. En 1840, Canales quien había reclutado gente en Texas, se unió a los mexicanos. El general Arista comunicó al pueblo la adhesión de Canales para con ellos y prometió arrancar las tierras a los texanos.

 

Pérdida de Texas

 

Santa Anna vuelve a la Presidencia de México.

 

La celebración de los Planes de Paredes de Guadalajara, el de Tacubaya y los Convenios de Estanzuela, en 1841, en los que Santa Anna participaba como Jefe del Ejército Regenerador y Presidente de la República provocaron su regreso.

 

Santa Anna tomó la Presidencia de nuevo en octubre de 1841. Con las Bases de Santa Anna se reorganizó en Monterrey la Junta de Comercio y el Tribunal Mercantil.

 

En 1843 se estableció el primer aserradero del Estado, propiedad del general Arista, que al año siguiente secundara en Nuevo León el levantamiento en el país el movimiento en contra de Santa Anna.

 

Invasión Norteamericana

 

En 1846, el coronel Zacarías Taylor y su ejército extranjero penetraron a Monterrey y se apoderaron de los lugares más importantes como Tenería, la Ciudadela, la Purísima, el Obispado, entre otros.

 

Esta situación levantó fuertes manifestaciones, por los lugares de los que se habían apoderado; pero una vez más, la fuerza de las tropas mexicanas no fue suficiente para derrotar al enemigo.

 

Por el contrario, los participantes mexicanos fueron juntándose en la plaza principal siguiendo las indicaciones del general Pedro Ampudia, Jefe Supremo del Ejército del Norte y del general Mariano Arista.

 

Tras varios días de lucha continua los defensores mexicanos se rindieron ante el enemigo. Dentro de esta contienda participaron dos mujeres, representantes de un papel importante dentro del movimiento.

 

María de Jesús Dosamantes y María Josefa Zozaya. La primera con vestimenta de capitán, armadura y gran valor participó en la defensa de la Ciudadela; la segunda, surtidora de municiones a quien las necesitara. La atención de las heridas y el ánimo para con los soldados al invitarlos a luchar y no decaer fueron sus acciones más sobresalientes.

 

Los Tratados de Paz, Amistad y Límites en Guadalupe dieron fin a esta contienda en 1848. Finalmente México cedió las tierras de Nuevo México, Texas y Alta California a Estados Unidos y se fijó la línea divisoria entre los dos países.

 

Después de firmada la paz se designó gobernador a José María Parás. También por esa época, una nueva epidemia de cólera se propagó en Nuevo León, y el bandido Agapito Treviño, alias "Caballo Blanco" provocó pavor en Monterrey y sus alrededores.

 

La Reforma

Revolución de Ayutla

 

El aumento del pago de impuestos, el incremento de los gastos de gobierno y la venta de "La Mesilla", fueron los motivos por los cuales inició la lucha de manifestación.

 

En 1854, tras varios años de la Dictadura de Santa Anna, el general Juan Álvarez se levantó en armas y expidió el Plan de Ayutla, el 1º de marzo.

En Tamaulipas lo apoyó Juan José de la Garza avanzando a Monterrey, donde Ampudia se encontraba atrincherado. Esto le causó la entrega del mando y del gobierno al coronel Mariano Moret, y éste a la vez, a Gerónimo Cardona por orden de Santa Anna.

 

La Revolución de Ayutla se había extendido por toda la República Mexicana. Santiago Vidaurri, entonces Secretario de Gobierno de Nuevo León abandonó la capital y partió con destino a Lampazos (1855), lugar donde lo esperaba Juan Zuazua, precursor de indios bárbaros.

 

Desde ahí, lanzó su Plan Restaurador de la Libertad. Avanzó hacia Monterrey junto con Zuazua, donde se declaró Gobernador y Comandante General Militar del Estado. Zaragoza se alió al movimiento en Ciudad Victoria, Tamaulipas, y Escobedo y Aramberri en el sur del estado.

 

Vidaurri nombró Coronel a Juan Zuazua, y juntos salieron hacia Matamoros, en contra de los centralistas. Camino a Matamoros, Zuazua continuó hacia San Luis Potosí, y Vidaurri regresó a Monterrey.

 

Para agosto de 1855 toda la República estaba dominada por los revolucionarios de Ayutla. Santa Anna se vio obligado a salir de México rumbo al puerto de Veracruz. Martín Carrera quedó como Presidente. Varios meses después, la Junta Representativa de los Estados nombró Presidente Interino a Juan Álvarez y éste nombró a Ignacio Comonfort como su sustituto.

 

Constitución de 1857

 

La Revolución de Ayutla contra la dictadura de Santa Ana dio como resultado, después de varios años, la Constitución del 5 de febrero de 1857.

A partir de la reunión del Congreso General Constituyente fue como se originó la Constitución política del Estado Libre y Soberano de Nuevo León firmado en octubre de 1857.

 

Vidaurri en Nuevo León

 

Vidaurri ocupó Monterrey en 1855, el 23 de septiembre. A su llegada convocó a los militantes para la firma del Plan de Monterrey. Desde ese momento estuvo a cargo del Ejército del Norte. Este plan estipulaba que mientras no existiera un Congreso Constituyente en el Estado, su soberanía no se asentaría por completo.

 

Desde ese momento Vidaurri representó un papel importante en el norte para lograr la caída de Santa Anna.

El joven caudillo estaba convencido de que la anexión de Coahuila a Nuevo León podía lograrse, y así fue en 1856, con el triunfo del Plan de Ayutla.

 

El Presidente Álvarez le permitió ejercer la jurisdicción de Coahuila, pero sin adhesión legal. El poder de Vidaurri se extendió tanto por el noreste, que se sospechó de la unión de varios estados para formar una unión independiente de México. Se le atribuyen hechos como la consumación de la Revolución, la pesquisa de los seguidores y del mismo Santa Anna.

 

Además de la firma de un decreto reformador de aranceles de aduanas marítimas y fronterizas, mejor conocido como "Arancel Vidaurri", con el que abrió los puertos de importación en Mier y Camargo, Laredo y Piedras Negras. La etapa de mejoras de construcción y de aperturas del mercado para el estado, durante 1857, también se le reconocen a Vidaurri.

 

Plan de Ayutla

 

A la llegada del nuevo Presidente, Ignacio Comonfort, con el Plan de Tacubaya lanzado por Zuluaga en 1857, las cosas cambiaron para Vidaurri. No se le reconoció el decreto de incorporación de Coahuila. Desde Tamaulipas y San Luis Potosí marcharon tropas para combatirlo.

 

El nuevo dirigente nacional desconoció la Constitución y ordenó que se convocara un nuevo Congreso para reconstruir la República. Comonfort maniobró en contra de los lineamientos que proponía la Constitución cuando aceptó entendimientos con los conservadores, por lo tanto los liberales que lo apoyaban lo consideraron traidor. Fue destituido por sus seguidores y ocupó la silla presidencial Félix Zuluaga en 1858.

 

Cuando tomó posesión el nuevo Presidente de la República que era apoyado por el partido conservador inició la Guerra de Reforma. Durante este periodo, Benito Juárez ocupó la Presidencia apoyado por el Partido Liberal y la Nueva Constitución, sin embargo, en las primeras fases del enfrentamiento, los conservadores lograron algunas victorias.

 

En Nuevo León, mientras tanto, Vidaurri se convirtió en el líder político y militar destacado, que sólo unificó fuerzas con Juárez para el combate a los franceses.

 

 

Juárez en el Estado, desacuerdos con Vidaurri

 

Las victorias conseguidas por los conservadores obligaron a Juárez a trasladar su gobierno al norte de la República, luego de la ocupación de la ciudad de México por los imperialistas.

 

En diciembre de 1860 Juárez publicó las Leyes de Reforma expedidas en Veracruz los días 12, 13 y 23 de julio del año en curso y en enero del 61 se expidió una nueva Ley, que complementaría el grupo de las ya existentes.

 

Estas consistían en la nacionalización de los bienes de la iglesia, el cierre de conventos, la implantación del registro civil, la secularización de los cementerios y la supresión de muchas fiestas religiosas.

 

Juárez llegó a la capital neoleonesa en febrero de 1864 con la protección de mil 300 hombres comandados por el general Manuel Doblado, ya que Vidaurri no quiso colaborar con los fondos obtenidos de las fronteras alegando que el estado las necesitaba para su estabilidad.

 

Mientras Juárez permaneció en la ciudad, el gobernador Vidaurri se refugió en la Ciudadela. Días antes de su partida, Juárez y Vidaurri mantuvieron una plática que no dejó grandes resultados.

 

Desde Saltillo Juárez respondió a la descortesía de Vidaurri con la separación de Coahuila de Nuevo León declarándolo traidor por dialogar con invasores franceses. Al enterarse de la noticia, el general francés Bazaine le envió a Vidaurri una carta invitándolo a que se uniera a sus tropas; pero el gobernador lo dejó a libre votación del pueblo.

 

 

Juárez reunía fuerzas en Saltillo para atacarlo y no aceptó ningún trato con el caudillo neoleonés. En caso de ser así, sólo sería por total sumisión. Vidaurri huyó de Nuevo León con 300 hombres, en Villaldama los interceptaron sus seguidores. Su ejército lo abandonó y él escapó cruzando el Río Bravo.

 

Monterrey sede del Gobierno de Juárez

 

Varios meses después de que Vidaurri escapara, Juárez entró a la ciudad con cinco mil hombres y fijó en el estado la sede de su gobierno durante cuatro meses. Su estancia fue insegura, ya que rondaban vidurristas al mando de Julián Quiroga, quien estuvo a punto de atraparlo; pero no lo logró por el abandono de Juárez de la ciudad.

 

Intervención Francesa

 

Vidaurri aliado al Imperio de Maximiliano

 

Las fuerzas francesas tomaron Monterrey. El general Castagny a cargo de las tropas. Vidaurri negoció su incorporación a los franceses, siempre y cuando se le otorgase la gobernación del departamento de Monterrey. Como le fue negada su petición, se unió a las fuerzas de Maximiliano en 1864. Al año siguiente fue nombrado Consejero de Estado por el emperador Maximiliano, y tiempo después, Ministro de Hacienda.

 

Republicanos e Imperialistas

 

Durante el año de 1865 Nuevo León fue tomado por los imperialistas; meses después por los republicanos, y de nuevo por los imperialistas. El general neoleonés Mariano Escobedo lideraba las tropas que derrotaron a los imperialistas. A mediados de ese año, Maximiliano se rindió ante Escobedo, y Monterrey quedó evacuado.

 

Vidaurri quedó en Querétaro junto con Leonardo Márquez. Con los pocos hombres que les quedaban llegaron a la capital. Los republicanos también abordaron la capital y Vidaurri fue delatado y entregado por un norteamericano a los contrarios. Fue fusilado sin juicio alguno, en septiembre. Esto permitió la entrada triunfal de Benito Juárez a la Ciudad de México el 15 de julio de 1867.

 

Restauración del Gobierno Militar

 

Con su regreso a la Ciudad de México, Juárez restableció el Gobierno Constitucional. Dentro de la reestructuración se realizaron elecciones constitucionales en Nuevo León resultando electo el general Gerónimo Treviño como gobernador.

 

A su vez, fue declarado por el Congreso como Presidente de la República Benito Juárez, y Sebastián Lerdo de Tejada como Presidente de la Suprema Corte.

 

En el Estado de Nuevo León, durante 1868 se realizaron algunos cambios en las villas y se conformaron algunos municipios. Durante 1869 el gobernador Treviño controló algunos brotes revolucionarios, como el de Pedro Martínez, quien fuera derrotado por las tropas lideradas por el propio gobernador, y el de Cenobio Cruz, que exigía la aplicación de la Constitución de 1857.

 

Efectos de la Reforma

 

Nuevo León pasó por una crisis financiera como consecuencia de los disturbios que se habían presentado contra los bárbaros, y por contrarrestar los surgimientos revolucionarios. A pesar de la situación que se vivía en el estado, el gobernador en turno, Gerónimo Treviño, realizó algunas mejoras.

 

El establecimiento de redes de comunicación entre los estados vecinos, la conclusión de construcción del Colegio Civil (que desde 1857 se había decretado), la construcción de la Escuela Normal de Profesores, son ejemplos de las obras realizadas por el gobernador en 1870.

 

Reelección de Juárez

 

Los levantamientos de los generales Calleja y Molino, en Tampico hicieron que el general Sostenes Rocha se diera a conocer. En 1871, cuando se dieron estos levantamientos, el general Rocha los derrotó y fusiló, tanto a los jefes como a los oficiales. También controló a los rebeldes que tomaron la Ciudadela.

 

Todos estas manifestaciones fueron consecuencia de la posible reelección de Juárez, que el 12 de octubre se hizo declaratoria a su favor, por contar con la mayoría de los votos. Los simpatizantes de Porfirio Díaz no esperaron para levantarse en armas, al igual que el mismo Díaz, que se encontraba en Oaxaca.

 

El repudio a la reelección ya tomaba auge en algunos estados de la República, como Zacatecas, Coahuila, Sonora, Durango y Nuevo león, entre otros. Con los generales García de la Cadena, Treviño y Donato Guerra a cargo, Díaz lanzó el Plan de la Noria.

 

El 1º de diciembre Juárez tomó posesión de la Presidencia de la República. El general Treviño gobernador reelecto de Nuevo León intentó levantarse en contra del gobierno; pero no tuvo él suficiente apoyo y su movimiento se disolvió.

 

En la Batalla de Zacatecas Treviño fue derrotado por el general Rocha. De regreso en el estado se refugió en el cerro del Obispado. Hizo frente a las fuerzas de Corella en el Cerro del Topo Chico; pero ambos se retiraron derrotados.

 

Muerte de Juárez

 

A la muerte de Juárez, el 18 de julio de 1872, Sebastián Lerdo de Tejada tomó el puesto en la Presidencia, y expidió la Ley de Amnistía General. En noviembre, el Congreso Federal lo declaró Presidente de la República por elección popular.

 

Lerdo de Tejada realizó una visita de cortesía al Jefe de la Revolución de la Noria, Porfirio Díaz.

 

Para tratar de ganar más terreno y evitar otro conflicto armado nombró como gobernador de Nuevo León a Narciso Dávila. Un año más tarde, en septiembre 25, las Leyes de Reforma se declararon constitucionales.

 

Plan de Tuxtepec

 

El primer día de 1876 Porfirio Díaz lanzó el Plan de Tuxtepec, como representación de la oposición a la reelección de Lerdo de Tejada. En marzo el plan se reformó, en Palo Blanco.

 

El 26 de octubre el Congreso declaró Presidente a Lerdo de Tejada. Varios días después el Presidente de la Suprema Corte de Justicia, José María Iglesias, expidió un documento donde declaró que las elecciones habían sido falsas.

 

Mientras tanto, las tropas porfiristas combatían y avanzaban, al mando del general tamaulipeco Manuel González. Una de las derrotas más conocidas de este grupo, mejor conocida como la Batalla de Icamole.

 

En la batalla, fueron derrotados los porfiristas por el grupo de Lerdo en Icamole. Los derrotados tuvieron que retroceder hasta Paredón. Por el avance continuo que tenían los porfiristas, el Presidente abandonó la capital, el 20 de noviembre. El 26 tomo posesión de la Presidencia Porfirio Díaz.

 

Genaro Garza García quedó electo como gobernador de Nuevo León, en 1877, y José María Iglesias, se manifestó como Presidente, desde Guadalajara. El 5 de mayo de 1877 tomó posesión como Presidente Constitucional Porfirio Díaz.

 

El Porfirismo

 

Viviano Villarreal gobernó el Estado de Nuevo León de 1879 a 1891, gobierno que rindió frutos desde sus primeros meses. La industrialización llegaba a los Estados Unidos, las maniobras administrativas de Villarreal dieron resultado. Prueba de ello fue la inauguración de del Edificio del Colegio Civil y la aparición de pequeñas empresas.

 

Villarreal enfocó su gobierno en la capital del Estado principalmente, aunque las necesidades del resto de los municipios fueron satisfechas. El Obispo Ignacio Montes de Oca ocupó la Diócesis de Linares durante el gobierno de Villarreal.

 

El país tuvo nuevo Presidente en 1881, Manuel González fue quien estuvo en la presidencia. En Nuevo León, el gobernador fue sustituido por Genaro Garza García, quien empujó notablemente la industrialización del Estado. El año de 1882 fue uno de los más significativos dentro de la etapa de desarrollo de la nación como de Nuevo León.

 

Muestra de ello fue la extensión del tramo de ferrocarril hacia Saltillo, la creación de la Cámara de Comercio. A pesar del avance económico que se tenía, la ciudad contaba aún con jacales de clases bajas.

 

El ferrocarril trajo consigo no sólo beneficios ala ciudadanía, sino también facilidades comerciales para los municipios de los alrededores provocando una baja comercial en Nuevo León. Los consumidores de otros estados ya no recurrían a los mercados neoleoneses a adquirir productos, sino que utilizaban a Monterrey como puente comercial al que llegaban productos extranjeros más baratos.

 

El comercio se vio afectado y las ventas bajaron notablemente para la gente del Estado. En Monterrey mientras el comercio lamentaba su decrecimiento, la industria se veía favorecida.

 

Durante el bienio 1883–1885 resultó electo Canuto García como Gobernador del Estado. Al término de su gobierno volvió al poder Garza García. En Nuevo León existían dos bandos: el primero, de tradiciones localistas, formado por los generales Treviño y Naranjo que apoyaban a Garza García, y el segundo, nacionalista, a cargo de Escobedo, Garza Ayala, Garza Melo y Teodoro Roel apoyando a Villarreal.

 

La rivalidad y oposición entre ambos mando fueron contundentes durante las elecciones realizadas en 1885. Díaz con sus planes de reelección comisionó a Bernardo Reyes para que continuara con los planes porfiristas en esta ciudad.

 

Reyes, siguiendo los planes de Díaz, fomentó el levantamiento de los perdedores durante las elecciones de 1885 (Escobedo, Garza Melo y Teodoro Roel). Garza García realizó un viaje a la ciudad de México para hablar con el Presidente, el licenciado Mauro Sepúlveda quedó como suplente al viaje del gobernador.

 

Mientras Garza García era entretenido en México por Díaz, el general Reyes apoyado por la oposición se lanzó contra Sepúlveda. El gobernador suplente abandonó la ciudad amenazado por Reyes. El Senado declaró desaparición de los poderes y, por tanto, estado de sitio. Se nombró a Reyes como Gobernador Provisional para que terminara con el periodo de Garza García.

 

Don Genaro se retiró a Villa de García, una vez que regresó ala ciudad. Los bandos de oposición existentes se disolvieron. Varios de los integrantes participaron con Reyes durante su gobierno. La organización de la Junta de Mejoras Materiales, que empezó y continuó proyectos que en administraciones pasadas habían sido planeados o quedado a medias en su construcción fue uno de los logros de Reyes.

 

La Junta llevó a cabo la edificación de la Penitenciaría del Estado, la reconstrucción del mercado Colón, la terminación de la planta alta del antiguo Palacio Municipal y la transformación de las plazas de Zaragoza y del Colegio Civil.

 

En 1886 se construyó un ferrocarril urbano, de tracción animal, la Biblioteca Pública del Estado, entre algunas otras obras más.

 

Para las elecciones realizadas en 1887 resultó electo como Gobernador, el general Lázaro Garza Ayala. Las mejoras de su administración fueron la creación de nuevas leyes para la enseñanza, la construcción del Puente Lerdo, y la realización de la Segunda Exposición del Círculo de Obreros, donde se manifestó que el progreso ya no tenía interrupción.

 

Garza Ayala con la firma de su secretario de Gobierno, Secundino Roel, expidió la primera Ley Protectora de la Industria. En ese mismo año, Díaz por medio de la reforma constitucional intentó su reelección. En diciembre de 1888 tomó por segunda ocasión posesión de la Presidencia de la República.

 

En 1889 resultó electo como gobernador Bernardo Reyes y Lázaro Garza García como Presidente del Tribunal. Reyes recibió un estado en pleno desarrollo, con vías férreas, comunicaciones y con un amplio comercio e intercambio con los Estados Unidos. Con estas condiciones, no sólo mantuvo el nivel de progreso que tenía el estado, sino que también realizó maniobras para incrementarlo.

 

El General mantuvo en orden y en paz al Estado mediante las columnas volantes conocidas como Las Acordadas. En poco tiempo, Reyes y Garza Ayala difirieron en opiniones. Garza Ayala decidió renunciar; mientras que Reyes se desligó del partido que lo llevó al poder y formó el suyo propio "Unión y Progreso".

 

Para el bienio de 1889 a 1891 fue el último, ya que el general Reyes se reeligió y reformó la Constitución ampliando el periodo gubernamental de 2 a 4 años, a partir de octubre de 1889. En diciembre,  de nueva cuenta tomó posesión Díaz de la Presidencia de la República.

 

Con la creación de establecimientos metalúrgicos, la creación de empresas de proyección nacional e internacional, el Estado aumentó su proyección y su mercado. Díaz se reeligió por cuarta y quinta ocasión en 1896 y 1900, Reyes de igual manera en 1895 y 1899.

 

Durante ese tiempo en Monterrey se recibió la visita de Díaz quien felicitó al gobernador por sus administraciones. Se presentaron epidemias de fiebre amarilla, se constituyó la Sociedad Mutualista Círculo Mercantil, entre otros.

 

En 1903 debía de someterse de nuevo a votaciones para la elección del futuro gobernante de Nuevo León. Como protesta por las reelecciones de Reyes se realizaron varias manifestaciones en contra. El general Reyes se vio obligado a renunciar como Ministro de la Guerra y su pugna con Los Científicos, grupo poderoso que apoyaba a Díaz, sirvieron como base para los manifestantes.

 

Los neoleoneses organizaron un partido, la Gran Convención Electoral Neoleonesa. Los integrantes realizaron continuas manifestaciones en honor de Díaz. Reyes también organizó la suya, pero sólo con caballeriza. El auge de Reyes como gobernador se estaba perdiendo, pero aceptar la derrota de éste en Nuevo León era para Díaz como perder ese territorio, lo defendió.

 

En 1904 se realizaron las elecciones donde la reelección no se pudo impedir. Se creó también la Vicepresidencia de la República y se aumentó el periodo presidencial a seis años. Reyes ocupó su cargo bajo la división de Los Científicos y los simpatizantes de Reyes.

 

Para 1905 Monterrey ya estaba comunicado vía férrea con Matamoros y algunos de los municipios. Entonces, quedó como centro ferrocarrilero. Entre los años 1906 – 1909 una gran cantidad de acontecimientos se suscitaron nacionalmente como en la localidad.

 

La formación de la agrupación obrera "Gran Círculo de Obreros Libres", la muerte del Arzobispo Santiago Garza Sambrano sustituido por Jacinto López, la mayoría de los ferrocarriles quedaron controlados por el gobierno.

 

Francisco Indalecio Madero escribió su libro "Sucesión Presidencial en 1910", obra que le sirviera como base para la creación de un nuevo partido. El Partido Democrático lanzó un manifiesto que causó gran alboroto entre la población. Estaba redactado por Calero, Urueta, Batalla y Zubarán, fue el primer indicio de la campaña presidencial de 1910.

 

Reyes por su parte, se encontraba peleando en Galeana. Era tanta su ambición de poder que se encargó del partido, razón por la cual se corrieron rumores de que se intentaba levantar en armas. Tuvo que refugiarse en Escobedo. El Estado fue víctima de una inundación, éste aprovecho y partió rumbo a Monterrey para ayudar en las acciones de rescate.

 

El movimiento político en el país era fuerte, unos especulaban sobre el futuro de Reyes como gobernante y otros, como Presidente. Díaz al saber de los rumores en torno a la Presidencia decidió desterrar a Reyes. El general salió con destino a Europa con pretexto de estudio de Ejércitos Europeos.

 

En octubre de 1910 se declararon Presidente y Vicepresidente a Porfirio Díaz y a Ramón Corral, respectivamente. Un mes después, Madero escapó de prisión en San Luis Potosí. El fugitivo había pedido a Díaz la Vicepresidencia para el Partido Popular. Al recibir la negativa de la petición, Madero instaló independiente el partido. Este tenía como candidatos a Madero para la Presidencia, y a Vázquez Gómez para Vicepresidente.

 

Revolución Maderista

 

El general José María Mier sustituyó a Bernardo Reyes en la gubernatura, éste nombró a Secundino Roel como Secretario de Gobierno. Madero había escapado del país por las continuas persecuciones; pero aún en esas circunstancias nombró la Comisión Gobernadora.

 

En varios estados de la República las manifestaciones avanzaban con más participantes, el 20 de noviembre inició en Puebla y en Chihuahua la revolución. Madero estuvo preso cuando realizaba su gira de propaganda con el pretexto de que realizaba actos subversivos.

 

Durante 1911 una serie de acontecimientos se suscitaron. Madero fue derrotado en Casas Grandes, se instaló el ejército de los Estados Unidos en las cercanías del Golfo y del Pacífico de México debido a la impresión que dejó Díaz en aquel país, el Gabinete del Presidente renunció quedando en manos de Limantour la organización del nuevo.

 

En el mes de marzo del mismo año, el Presidente leyó ante el Congreso un mensaje donde proponía a las Cámaras Federales la reforma de la Constitución para establecer la "no reelección" tanto del Presidente como del Vicepresidente.

 

La revolución avanzó por toda la República, y la actitud de los Estados Unidos era cada vez más desafiante.

 

Entre los comisionados de Díaz y los de Madero donde se establecía la renuncia a fines de mes del Presidente y del Vicepresidente tomando posesión provisional Francisco León de la Barra, mientras se realizaban las elecciones. Este convenio se firmó el 21 de marzo de 1911 en Ciudad Juárez, Chihuahua.

 

El 25, quedaron firmadas las renuncias de Porfirio Díaz y de Ramón Corral. El General Díaz partió de la capital con rumbo a Veracruz escoltado por Victoriano Huerta. Al día siguiente tomó posesión el Presidente interino. En julio realizó su entrada triunfal a México Francisco I. Madero. El 15 de octubre fue electo como Presidente Francisco I. Madero. Un mes después tomó posesión de su cargo.

 

La petición que hiciera Díaz a la Cámara acerca de las reformas a la Constitución para la no-reelección fue realizada. Se publicó el Decreto prohibitivo de la reelección de los presidentes y vicepresidentes de la República, así como de los gobernadores.

 

A lo largo de ese año se originaron algunos brotes contrarios. Emiliano Zapata publicó el Plan de Ayala, Bernardo Reyes arribó a México procedente de Estados Unidos, fue arrestado en Linares. El general Mier había resultado electo como Gobernador del Estado, cuando las fuerzas maderistas lograron el triunfo presentó su renuncia. Los sustituyó Leobardo Chapa, Presidente del Tribunal.

 

El nuevo Arzobispo de Linares fue Francisco Plancarte y Navarrete, quien gobernó la Diócesis hasta 1920. La intranquilidad rodeaba al estado, en Chihuahua se manifestó Pascual Orozco, quien fue derrotado por Victoriano Huerta en Bachimba. También en Veracruz se levantó Félix Díaz, quien quedó en prisión después de atacar la plaza del puerto.

 

En 1913 Félix Díaz realizó un cuartelazo en la Ciudadela. El general Reyes es liberado de prisión por varios de los manifestantes de la Ciudadela. Reyes y sus seguidores entraron al Palacio, fue recibido a tiros y calló muerto al igual que varios de sus simpatizantes.

 

Al cabo de varios días de combate fueron aprehendidos el presidente Madero y el Vicepresidente Pino Suárez. Cuando Madero y Pino Suárez eran trasladados de una prisión a otra fueron asesinados. Por los rumores de que sus seguidores los ayudarían a escapar, el 22 de febrero fueron asesinados.

 

Sustituyó en la presidencia Pedro Lascuraín; pero por un periodo muy corto. El general Victoriano Huerta ocupó la presidencia.

 

Plan de Guadalupe y el Constitucionalismo

 

Por medio de la promulgación del Plan de Guadalupe, Huerta fue desconocido como Presidente, el 26 de marzo. Venustiano Carranza asumió la Jefatura del Ejército Constitucionalista. El 15 de julio presentó Huerta su renuncia, lo sustituyó Francisco Carvajal, como Presidente Interino.

 

Al día siguiente entró triunfal a la ciudad de México Carranza, quien trató de solucionar los problemas suscitados entre carrancistas y villistas en la Convención de Aguascalientes. El 1º de noviembre se realizó la Convención. Carranza como Jefe, le otorga a Francisco Villa la Jefatura de la División Norte.

 

Las rivalidades entre los bandos cesaron. Los villistas ocuparon Monterrey y fue gobernador el hermano de Madero, Raúl Madero. Las tropas estadounidenses que se encontraban ancladas en las orillas de los mares del país desembarcaron en abril, y fue en noviembre cuando de nuevo embarcaron y partieron de Veracruz.

 

En 1915 se expidió en Veracruz la Ley de Restitución y Dotación de Ejidos y Tierras en los Pueblos, lugar donde se encontraba Carranza.

 

También se celebró en ese año un pacto entre los constitucionalistas y la Casa del Obrero Mundial, donde Carranza se comprometió a ayudar a la causa obrera.

 

Villa quien ocupaba la parte norte del País, fue derrotado y retirado de Nuevo León. Ocuparon los carrancistas la capital. Fue gobernador interino, el general Ildefonso Vázquez, quien murió tiempo después en una batalla contra los villistas.

 

Carranza nombró como Gobernador de Nuevo León a Pablo A. De la Garza.

 

El 5 de febrero de 1917 se promulgó la Constitución Política de la República tuvo vigor hasta el 1º de mayo. Ese día protestó Venustiano Carranza como Presidente de la República. Durante su gobierno restableció el orden constitucional de la República con Estados Unidos, pero los restos de la dictadura no permitieron el logro de la reestructuración.

 

Se realizaron elecciones en Nuevo León, los candidatos fueron Pablo A. De la Garza y Nicéforo Zambrano. Pero lo que lograron los partidarios de Nicéforo fue que el general Ricaut sustituyese a De la Garza. Ricaut tuvo como Secretario de Gobierno a Carlos Ayala, amigo personal de Carranza desde los tiempos del porfiriato. Finalmente Nicéforo triunfó en las elecciones.

 

El Congreso Constituyente de Nuevo León, copió con sólo algunas variantes la Constitución General de Querétaro. Además, se creó la Junta de Beneficencia Privada, que se integró más tarde a la Pública sin grandes resultados.

 

El estado sufrió a finales de 1918 la epidemia de Influenza Española, que se regó por todo el país. En 1920 se realizaron elecciones presidenciales, los candidatos eran Carranza y Obregón, quien a tiempo atrás fuese vencedor de Villa y contaba con el apoyo revolucionario. A pesar de las mejoras que se habían realizado a través de los diferentes gobierno, la democracia aún no surtía un efecto primordial pues las elecciones se realizaron en circunstancias irregulares.

 

La presidencia propuso a su candidato, y como eran ellos quienes tenían de su lado las urnas, los que apoyaban a Obregón se levantaron en armas. Se expidió el Plan de Agua Prieta contra Carranza, con este se levantaron varios jefes militares. Venustiano Carranza fue asesinado en Tlaxcalaltongo, Puebla, cuando intentaba viajar rumbo a Veracruz después de estar amagado en la capital.

 

Se nombró como Presidente interino a Adolfo de la Huerta, cabecilla del Plan de Agua Prieta.

 

En diciembre tomó el cargo de Presidente de la República el general Álvaro Obregón.

 

Cuatro años después fue electo Presidente Plutarco Elías Calles.

 

Inició la administración del gobernador Sáenz en 1924, éste convirtió en Melchor Ocampo a la Congregación de Charco Redondo. La pavimentación de la ciudad fue avanzando, iniciados los trabajos en la época de Alfredo Pérez se intensificaron con Sáenz. La ampliación de las avenidas centrales como Morelos y Carranza, así como Zaragoza.

 

Los horarios de los trabajadores fueron establecidos. Las jornadas y las condiciones laborales de los obreros cambió con la promulgación de la Ley sobre la Jornada Máxima de Trabajo, en 1922. Inicio de la etapa de construcción de las Escuelas Monumentales. Creación de carreteras y extensión mayor de algunas ya existentes. Dio inicio la era de la Presas. El inicio de la Universidad, de varios parques y de edificios y templos.

 

Cambios gubernamentales

 

En 1931 tomó posesión del Gobierno del Estado Francisco Cárdenas, algunos políticos pretendieron lucrar con su gobierno y al no poder hacerlo tuvieron que esperarse hasta que este cumpliera dos años en el poder.

 

Concluidos estos dos años (1933), no fueron necesarias las elecciones sino sólo la asignación de la Cámara a Pablo Quiroga.

 

Para 1935, cuando era Presidente de la República Lázaro Cárdenas, Plutarco Elías Calles Jr. se lanzó como gobernador del Estado. Su contrincante fue Fortunato Zuazua, quien recibió apoyo del Gobierno Federal. Por las influencias de ambos candidatos las elecciones fueron canceladas y se nombró al general Morales Sánchez como gobernador interino.

 

Durante la nueva contienda por el Gobierno del Estado quedó electo Anacleto Guerrero, cuando Plutarco Elías Calles, Jr. fue eliminado. Al término de su gubernatura, el general Bonifacio Salinas se convirtió en el nuevo Gobernador del Estado en 1939, y en 1943, ya con seis años del periodo, quedó Arturo B. De la Garza como representante del Gobierno del Estado.

 

En el año 1949, apoyado por el Centro, fue declarado gobernador, Ignacio Morones Prieto. José Vivanco sustituyó al entonces gobernante, al ser llamado aquel, por la Secretaría de Salubridad.

 

Perfil y avances generales

 

Como consecuencia paulatina de todos los levantamientos y movimientos revolucionarios, desde 1910 el país se ha ido convirtiendo en una nación más desarrollada y con una visión del futuro mucho más clara. Después de entregarse tierras a los campesinos, de apoyarse a las organizaciones obreras, del renacimiento en la educación se presentó una consolidación y estabilización política provocando un notorio avance económico.

 

En la agricultura y en la ganadería se lograron avances sustanciosos, una vez que se superó la problemática a la que los nuevoleoneses se habían enfrentado. Las sequías constantes, las enfermedades y robo continuo de ganado representaron barreras, al parecer, difíciles de sobrepasar.

 

Pero a pesar del borroso futuro que se dejaba vislumbrar, los neoleoneses construyeron presas y con sus sistemas de riego se abrieron más extensiones para el cultivo. El apoyo a los ganaderos dio como resultado una elevada producción en 1950.

 

La industria ya contaba con las fábricas de hilados y tejidos "La Fama" creada en 1856; "El Porvenir", en 1872, y "La Leona", en 1874. El desarrollo industrial propiamente dicho dio inicio en 1890, a partir de la creación de la empresa "Cervecería Cuauhtémoc", y con el nacimiento de la "Compañía Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey", en 1900. A partir de éstas, el territorio del estado se pobló con una gran cantidad de empresas, entre ellas sobresalió "Hojalata y Lámina", en 1942.

 

Gracias a la creación y al establecimiento de las primeras empresas se considera a Nuevo León como un Estado de gran producción y potencial industrial. Actualmente ocupa el cuarto lugar, en producción mundial de cemento y el primero en vidrio del Continente Americano. Destaca también nacionalmente en la producción de cerveza, acero, aparatos de aire acondicionado, entre otros.

 

Las empresas regiomontanas han aportado novedosos procesos de producción en vidrio, celulosa, cerveza, cementos, cigarros, tubos, láminas, entre otros. Un claro ejemplo es Hylsa, que en 1957 descubrió y desarrolló el proceso Hylsa, para la obtención de fierro y la producción de acero, mejor conocido como fierro esponja. Esta tecnología permitió la obtención del acero mediante un proceso industrial llamado de "reducción directa", el cual se ha aplicado en cientos de empresas alrededor del mundo.

 

Dentro de lo que respecta a comunicaciones y transportes, se consideran a éstos como los aspectos que le permitieron al Estado su desarrollo económico. Una vez que se fortalecieron, se les designó mayor capital y se instalaron Juntas de Mejoras Materiales en los municipios para dotar generar empleos en construcción de carreteras, caminos, escuelas, tendidos de líneas telefónicas, jardines, plazas y otro tipo de obras. Como fruto de la construcción fueron las carreteras de Matamoros a Mazatlán y de Monterrey a Texas.

 

Durante 1950 se hicieron caminos para la explotación de los recursos naturales del Estado. Por tal motivo, Monterrey se convirtió en el segundo centro ferrocarrilero de México. En 1962, se construyó e inauguró el primer tren rápido de Monterrey a México, "El Regiomontano".

La creciente mejora comercial del Estado no hubiera sido posible sin el interés y la inclinación por las actividades comerciales y financieras de los neoleoneses. Poco a poco fue fortificando sus bases para servir de apoyo a la riqueza existente en el Estado.

 

Por tanto, en la actualidad, se cuenta con establecimientos comerciales que se dedican a la venta de productos alimenticios elaborados, equipos de transporte, artículos para el hogar, materiales de construcción, combustible y lubricantes, por mencionar algunos.

 

En la educación se lograron grandes avances a partir de la revolución armada. En 1920 se contaba con el funcionamiento de 378 escuelas primarias, y la educación secundaria se impartía en el Colegio Civil; además, existían las escuelas de Jurisprudencia, Medicina, Normal, de las Labores Femeniles y Academias Comerciales.

 

En 1933 se creó la Universidad Autónoma de Nuevo León; pero los problemas estudiantiles provocaron su cierre. Se logró la reestructuración hasta 1943, en ese mismo año se creó el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey. Ambas instituciones educativas fomentan la investigación científica y tecnológica.

 

Sobresalen los maestros Miguel F. Martínez, Serafín Peña, Pablo Livas, Germán Almaraz, Plinio D. Ordóñez y Moisés Sáenz.

En medicina, el doctor José Eleuterio González, hijo adoptivo de Nuevo León.

 

En el ámbito artístico el Estado cuenta con un sin número de exponentes como Belisario de Jesús García y Armando Villarreal, notables músicos y compositores. Así como Alfredo Ramos Martínez y Federico Cantú, como pintores. Y a José P. Saldaña e Israel Cavazos Garza, como historiadores.

 

Gracias a la creación de sindicatos para los trabajadores, se pudieron solucionar gran cantidad de problemáticas que existían con y entre los obreros. Sin la participación de los trabajadores no hubiese sido posible la ascendencia de la economía y el desarrollo del estado.

 

En 1918 se creó la Junta de Conciliación y Arbitraje con representantes de todos los sectores: obreros, patrones y gobiernos. Con el fin de resolver los conflictos laborales, así como las jornadas, los salarios y demás aspectos competentes en el ámbito laboral.

 

Con la producción de los trabajadores nuevoleoneses, se ha logrado producir todo tipo de artículos para la subsistencia de la población, y con esto se ha logrado el bienestar de la misma.

 

Los Medios Masivos de Comunicación también tuvieron su auge y empuje dentro de la industria neoleonesa, ejemplo de esto fue el ingeniero Francisco Constantino de Tarnava, quien instaló la primera estación radiodifusora en 1921. Este se convirtió en el primer locutor de América Latina.

 

Otro nuevoleonés distinguido fue el doctor Jorge A. Domínguez, estudioso de las propiedades curativas de algunas plantas de la región.

El doctor Eduardo Aguirre Pequeño, es otro claro ejemplo del empeño regiomontano, gracias a su tratamiento para la curación de la enfermedad de la piel, llamada mal del pinto.

 

En el municipio de Montemorelos, el profesor Ramiro Tamez Mancilla construyó un planetario que incluye un sismógrafo; además del desarrollo de un cinematógrafo que funciona con energía solar y los relojes astronómico de torre y solar.

 

Por todo su historial se puede decir que el estado de Nuevo León es líder en lo que refiere a educación, cultura, economía, investigación y creación de escuelas superiores, así como en la creación de periódicos, teatros, museos y casas de cultura.

 

Sin olvidar en especial a Monterrey "La capital industrial de México".